Cangas del Narcea,

Pepe RODRÍGUEZ

Tres empresarios, bien conocidos en la comarca, han sido premiados por Asociación de autónomos y pequeños empresarios del Suroccidente (APESA) coincidiendo con la celebración del décimo aniversario de la creación de esta asociación. José Antonio Fernández, fundador de panadería Penles; Magdalena Álvarez, presidenta de la asociación de turismo rural; y Vicente Fernández, de Bodegas La Muriella, fueron elegidos por los miembros de todas las juntas que ha tenido la asociación estos diez años como representantes de los valores del empresariado y los autónomos del Suroccidente.

José Antonio Fernández manifestó sentirse «muy orgulloso del premio» y explicó que «hay que reconocer la labor que ha hecho la asociación todos estos años. Hay que ver donde estábamos y donde estamos ahora para valorarlo como merece».

Por su parte, Magdalena Álvarez, quien no sólo preside la asociación de turismo rural, sino que es la cara más significativa de todo el sector, creado prácticamente de la nada por pioneros como ella, se mostró «contenta, satisfecha y agradecida. Es el reconocimiento al esfuerzo que significa montar un negocio en un entorno rural, una actividad nueva que se ha consolidado por el trabajo de mucha gente, no sólo mío, por supuesto». Calificó como «imprescindible» la labor de APESA: «Yo creo en el asociacionismo, en el trabajo conjunto y APESA se encarga de aglutinar y apostar por los pequeños autónomos, es importantísima en la comarca. Hay muchísimo esfuerzo detrás de esas siglas, mucha gente aportando todo lo que tiene, y eso yo lo puedo certificar».

Por último, Vicente Fernández, que lleva 43 años al frente de sus bodegas, vendiendo vino por la zona, declaró: «Me hace mucha ilusión, pero creo que había gente que lo merecía más que yo, gente que ha trabajado como nadie y merecía estar hoy aquí recibiendo un premio». En su opinión, «APESA hace una labor muy buena para sus asociados y para toda la zona. Pero hemos de estar más unidos todavía, hacer más fuerza, es la única manera de frenar la marcha que llevamos y que es la que todos los pequeños comerciantes y empresarios conocemos. Hay que seguir luchando por los derechos sociales, por los empresariales y por los individuales, ya que las presiones exteriores del mercado son cada vez más fuertes».