No hay ninguna sociedad que esté a salvo de conflictos entre sus socios. Tampoco las familiares, que pueden parecer menos propensas a ellos. Sin embargo, cuando surgen discrepancias, el doble vínculo familiar-empresarial aumenta sus consecuencias y hace que sean más complejos y difíciles de superar. Son bien conocidos, por la difusión que han tenido en los medios, los conflictos que han afectado a algunas de las sociedades familiares más relevantes de nuestro país.
El objetivo de esta jornada es analizar, a la luz de algunos de esos casos, el origen de los conflictos más frecuentes en sociedades familiares y las consecuencias jurídico-societarias derivadas de los mismos. Asimismo analizaremos en qué medida pueden prevenirse y con qué herramientas cuenta la Empresa Familiar para ello.